aspirando los colores de todos tus cuadros
Tú y yo hemos roto hace poco. Después de un tiempo sin vernos voy a tu fiesta de cumpleaños. En tu casa, pero no tu casa, sino una mucho más grande, rollo mansión, llena de cuadros, con escaleras y varios niveles y rincones. Durante la fiesta, en la que yo estoy incómodo a tu lado, volvemos a liarnos. Yo, confío en que es una reconciliación y que volvemos a estar juntos, pero me dejas claro que no. Tenemos una discusión y me voy, pero tú no me dejas, empiezas a perseguirme por la casa, gritando, discutiendo… me paro, nos gritamos, me alteras, me hundo, me rabias, me desespero. Te pegó un bofetón, delante de todos tus amigos, que son tus amigos y mis amigos, pero no reconozco como míos, sino como tuyos. Después de la bofetada sé que ya no hay nada que hacer. Se me cae el mundo. Lloro. Te pierdo, para siempre. No lo asimilo. Todos tus amigos se giran conmigo, me dicen que me vaya, que no tiene sentido seguir ahí después de lo que he hecho. Me recorro la casa con una aspiradora, aspirando...